Cesto personalizado con madroños

Hace mucho tiempo, os enseñaba cómo había personalizado un cesto de mimbre con una puntilla y un lazo aquí.

Hoy os traigo al gemelo, al que le he puesto madroños XXL.
Así es cómo estaba hasta ahora:
Que se ha quedado así de majo después de pasar por mis manos:

Ha pasado de ser un cesto sosaina a tener personalidad propia. Tanta, que mi hija lo ha cogido para meter sus (miles de) Barriguitas.

A mí todavía me dura el romance con los madroños, me pasa con todo, cuando me gusta algo no paro con ello hasta que me canso.

¡Feliz miércoles!




2 comentarios:

  1. Yo creo que la idea es hacer de algo normal, algo que te llame la atención. Y esta ha sido una muy buena solución

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  2. ¡Muchas gracias! Mi filosofía es "si se puede transformar no se necesita comprar"
    :-D

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