Pasar de falda a fular con puntilla y borlas


¡Hola a tod@s! ¿Qué tal estáis? ¿Qué tal el fin de semana? Por aquí llovió lo que quiso, aunque eso no nos impidió ir el domingo al monte para que la pequeña de la casa conociese los corderos recién nacidos del rebaño de su abuelo.
Hoy sigue haciendo un frío que pela y llueve como si lo echasen al calderados, así que para alegrarlo un poco y añorar todavía más los días de sol, os traigo una transformación que hice este verano: convertí una falda en un fular. 

Sí, sí, de falda a fular en unos cuantos descosidos, un poco de puntilla y unas borlas que me hice yo misma porque las que encontré por ahí me parecieron carisísimas, aparte de que no daba con el color que yo quería:



Todo esto empezó un día del verano pasado en que fuimos al Museo del Jurásico de Asturias, en Colunga (pendiente tengo todavía ese post). Antes paramos a comer en Ribadesella, con tan buena suerte, que había un mercado de esos que hacen en los pueblos todas las semanas.

Dimos la obligatoria vuelta mirando todos los puestos, porque ir a un mercado y no mirar nada es algo que simplemente no me entra en la cabeza, si hay mercado vas y miras y te compras algo, que siempre hay un chollo que no puedes dejar escapar.

Así estábamos cuando vi uno donde vendían ropa a un (¡1!) euro. Toda mezclada en un montón, chaquetas, pantalones, camisetas, faldas, todo allí al grito de venga María que lo traigo barato.

Yo me acerqué porque el cartel de todo a un euro tiene un magnetismo que no hay quien se resista, da igual lo que tengan allí, ropa, joyas de plástico o chanclas de felpa, lo importante es ver qué te puedes llevar por tan poco.

Cuando vi la falda ni siquiera vi una falda, en ese momento ya visualicé un fular con borlas fucsia en los extremos:


El proceso fue muy sencillo, tanto como descoserla por los bordes, unir las dos partes por lo que había sido la cintura con un entredós de puntilla y añadir las borlas:


Y este es el resultado:
 

Ya os he dicho que las borlas las hice yo misma, porque aparte de no encontrar el color, me pareció una barbaridad lo que me pedían por cada una. Las hice con un ovillo que compré por menos de dos euros. Otro día os traigo el tutorial para hacerlas porque es sencillísimo además.

   
Reconozco que muchas veces hago estas cosas simplemente por ver cómo quedan, porque mira tú si no habrá pañuelos bonitos para comprar por ahí pero quizás porque es un experimento mío me gusta más. ¿A vosotr@s qué os parece?

Que tengáis un feliz lunes dentro de lo posible por lo menos aquí en el norte y nos vemos mañana.








No hay comentarios:

Publicar un comentario